Tras más de un año de preparación y despues de cuatro años de practicar, el sábado pasado impartimos nuestro primer curso de Hashira en el dojo para nuestros alumnos más avanzados. 🙂
Las ataduras en hashira (poste) son nuestras favoritas por el gran componente emocional que tienen y lo increíblemente bonitas que son. Las descubrimos hace ya 5 años en Copenhagen, tras ver a una pareja en hashira en el Kinbaku Lounge, y desde entonces las intentamos aprender y practicar todo lo posible. Al año siguiente tuvimos la suerte de conseguir plaza en Turin en un workshop de Riccardo Wildties y Red Sabbath que nos cambió nuestra percepción del shibari y por lo que les estamos agradecidos. Margot escribió sobre ese workshop en el artículo «Pensamientos sobre aquel workshop de hashira» Durante ese workshop, que fue muy intenso y probablemente el mas duro que hemos hecho, aprendimos una gran cantidad de posiciones en hashira a lo largo de varios días, incluyendo algunas de las ataduras firma de Riccardo. Hemos estado practicandolas todo lo posible durante varios años. Y el pasado fin de semana , tras mucho trabajo, dimos nuestro primer curso de iniciación a hashira de un día.
No mucha gente lo sabe pero una de las razones por las que construimos el dojo de forma tradicional fue para poder organizar el curso de hashira y tener postes suficientes con las medidas estándar japonesas.
Vinieron alumnos de todas partes de España (país vasco, andalucía, murcia…) e incluso de Portugal. Y algunos de ellos se quedaron a dormir en el dojo sobre tatami y futones. 🙂
Fue un curso muy especial para todos. Tras hablar de los motivos por los que se ata en hashira, de las formas de establecer puntos y de arquitectura y estética japonesa, enseñamos tres posiciones en hashira: una en suelo, la posición clásica con futomomos y una inversión. A pesar de ser un curso de iniciación de un día, significó para el grupo superar una barrera hacia otro tipo de ataduras, emociones y retos. Entendemos lo complicado que puede llegar a ser salir de tu zona de confort, así que procuramos crear un espacio lo más seguro y agradable posible para todos. Donde nadie estuviera por encima de nadie y todos nos ayudásemos y apoyásemos.
Esperamos haber podido transmitir un poco de lo que aprendimos aquellos días en Turín aprendiendo de Riccardo, y animar a nuestros alumnos a que avancen y evolucionen en esta forma de atar..
Nos sorprendió lo bien que se lo pasaron todos atando en hashira y la soltura con la que lo consiguieron. Algunas personas atadas nos dijeron que les gustó incluso más que las suspensiones convencionales y entraron rápido en ese espacio tan maravilloso de semenawa.
No solo fue un curso técnico, también trabajamos mucho la gestión emocional y procuramos que tanto atadores como modelos adquirieran habilidades nuevas para mejorar sus sesiones.
Como detalle, que de ahora en adelante incorporaremos en los cursos avanzados, regalamos a todos los participantes polaroids de sus ataduras para que las tengan de recuerdo. Una forma simbólica de capturar un momento especial en el tiempo 🙂
Tenemos mucha suerte de teneros como alumnos y nos hacéis sentir orgullosos cada día. Esperamos volver a organizar otro curso de hashira pronto. <3
Muchas gracias por el feedback tan maravilloso que nos habéis dado en este curso.Especialmente que hacer este curso os ha ayudado a ganar confianza y mejorar la relación con vuestra pareja de cuerdas.