Desde prácticamente sus inicios, somos parte de la revista y grupo de investigación Kinbaku Society of Berlin. Grupo en el cual curiosamente solo una persona es de Berlín 😛 Es un proyecto muy analógico, nos gusta sentir el papel, no distribuimos copias digitales, y son numeradas y distribuidas a mano. Y por eso, cada ciertos meses, nos reunimos en persona.
Esta reunión decidimos hacerla en Madrid, en nuestro Dojo. 🙂
El único plan establecido para el fin de semana, que comenzó oficialmente el viernes, fue una noche de shows abierta al público el sábado, en la que participaron miembros de la Sociedad Kinbaku de Berlín. Por lo demás, hubo espacio para los que querían hacer proyectos, para los que simplemente querían atar, y para tostarnos al sol (o la sombra, si eres Alexander).
El viernes, el día comenzó con un desayuno en el bar de enfrente. Tras una breve charla, decidimos grabar en vídeo una sesión de kinbaku entre Saara Rei y Alexander Ma, un proyecto que solo que se puede crear bien cuando se trabaja en equipo. Con la idea de que una parte del vídeo estuviera dedicada a «cómo cortar ropa interior», algunos de los miembros nos fuimos al centro comercial a comprar bragas que se pudieran cortar. En cuanto se puso el sol, preparamos el dojo para grabar el vídeo. Aunque finalmente ninguna ropa interior sufrió daño alguno, pudimos disfrutar de una sesión de cuerdas super bonita en la que todos pudimos colaborar: manejando las cámaras, gestionando el sonido, ajustando las luces, haciendo fotos de making-off, dando apoyo a la modelo durante las pausas, etc. Cada persona involucrada en la producción, tanto detrás de la cámara como delante, fue esencial para captar ese momento. Y son proyectos como éste los que fomentan la unión que buscamos en nuestras investigaciones en torno al kinbaku. Tras el éxito del rodaje, el grupo se sentó alrededor de una mesa llena de sushi mientras Alexander cerraba la noche con su tradicional presentación «keynote».
El sábado fue el día de nuestro gran show. Hubo una lista de invitados de 40 personas procedentes de toda España (algunos incluso volaron desde Canarias y otros condujeron desde el País Vasco sólo para el show). El equipo de la Sociedad Kinbaku de Berlín estábamos preparados para recibir a los invitados con camisetas a juego. Muchos de los miembros pasaron el día descansando y poniéndose al día. Swen, Door y Darkpath Tosenk se reunieron para hacer un playshooting en el ascensor y en el exterior mientras otros jugaban, practicaban y trabajaban muy seriamente en el próximo número de la revista N°13 sobre Mitos y Cuentos (Fairy Tales). Swen y Zor (a menudo llamados «los Zswen») trabajaron incansablemente, junto con la directora de este número de la revista, Komainu, y el redactor jefe, Alexander, para asegurarse de que el diseño de la revista estuviera en consonancia con la visión Komainu; gracias a ellos, todos estamos súper agradecidos de poder decir que tenemos un excelente número de la revista en camino.
A medida que se acercaba el show, muchos miembros de la comunidad del dojo vinieron a ayudar a preparar el espacio. Con una comunidad local tan maravillosa, el espacio se llenó rápidamente de caras sonrientes, deseosas de ver lo que les esperaba. Hubo tres actuaciones, cada una de ellas representando un rincón de Europa que ocupa la Sociedad Kinbaku: Iter Impius & Komainu (Polonia), Alexander Ma & Nawataneko (Alemania), y Scot & Tanja (Copenhague). Cada actuación fue conmovedora, y nos recordó por qué nos queremos: estábamos unidos, llorando, riendo, haciendo bromas. Sintiendo vergüenza, sintiendo amor. Haciendo amor. Y tratando de gestionar el dolor al que todos nos enfrentamos.
Cada actuación complementó la energía de la otra, lo que hizo que la noche terminara con pura alegría cuando Scot y Tanja nos llenaron a todos con su afecto juguetón el uno por el otro, expresado con mucha gracilidad y espectaculares transiciones, que siguieron a las preciosas lágrimas de Komainu en el bambú y de Nawataneko en el hashira. Y, por supuesto, tuvimos la suerte de que los Zswen se encargaran de documentar de forma maravillosa, tanto con fotos como con vídeo, cada uno de esos preciosos momentos. La velada se cerró con otra ronda de sushi, sonrisas y mucha euforia.
Después del desayuno del domingo, que a estas alturas parecía una tradición, el grupo volvió al dojo. El equipo la revista #13 de Fairy tales & Myths se reunió con la diseñadora inicial del número para un día de trabajo intenso, mientras que otros siguieron jugando, relajándose y pasando el rato. El día terminó con un pequeño kinbaku salon en el que algunos miembros de la comunidad del Dojo de Shibari de Madrid vinieron a pasar el rato y atar junto a la gente de la revista. Fue una sensación maravillosa simplemente estar juntos, ser nosotros mismos, y experimentar con nuestra creatividad y sexualidad de una manera que se siente tan libre. Pudimos conocernos mejor, nuestras esperanzas, miedos e inseguridades, y trabajamos para encontrar un espacio donde entendernos, o al menos, aceptarnos.
Como expresó Alexander, todos estamos unidos en nuestra desviación de la sociedad, y quizás eso sea una fuerza de unión mayor que cualquier otra. Y a partir de ahí, tal vez, podamos encontrar nuestro punto de entendimiento. Los miembros se fueron marchando uno a uno para volver a casa, sabiendo que probablemente algunos nos nos veremos hasta dentro de un año. Fue bonito pasar las últimas horas simplemente siendo vulnerables juntos. Aunque todavía no sabemos por qué hacemos kinbaku y tenemos la sociedad, ahora podemos pasar este invierno con una mejor idea de quiénes somos como grupo, y cómo nos relacionamos, para poder averiguar cómo avanzar juntos como Kinbaku Society of Berlin.
Queremos agradecer a todos los miembros de la Sociedad por visitarnos y compartir el Dojo con nosotros. Ya os echamos de menos. 🙂